LA ROBÓTICA LLEGÓ PARA QUEDARSE: 

«TODO LO IMAGINADO PUEDE SER POSIBLE»

¿Alguna vez te imaginaste ser el inventor de un ahorrador de agua? ¿O de un monitor cardíaco? O mejor aún,  ¿de un dispositivo mecánico para asegurar las tapas del alcantarillado? ¿O ser el creador de un sensor de incendios?

Estas son las invenciones de los niños que hacen parte del Hogar Shekinah y del Hogar Encuentro, gracias a la alianza establecida con la fundación VASED, a través el voluntariado de  IBM.

Este proyecto desarrolla una propuesta innovadora que pretende generar espacios de aprendizaje mediante la integración del ingenio, la creatividad y los conocimientos básicos, que permiten no solo crear soluciones tecnológicas a problemas de la comunidad, sino fortalecer en los y las participantes capacidades y habilidades desde la formación integral, generando espacios de aprendizaje, diferentes al tradicional entorno educativo. El proyecto está estructurado por varios niveles  de acuerdo a su complejidad, los cuales se dividen en introductorio, básico, avanzado y master 1 y 2.

A medida que avanzan en los niveles, se puede evidenciar en los 31 niños participantes, un mejor desempeño académico, relaciones de respeto y cooperación, una mayor definición de su proyecto de vida, a través de opciones vocacionales,  y el planteamiento de diversas alternativas frente a la solución de problemas de la vida cotidiana.

Desde la ACJ-YMCA se valida y se incentiva estas metodologías, no solo para la adquisición de conocimientos específicos, sino como una oportunidad para inspirar oportunidades de vida digna en los participantes y en los voluntarios, quienes en doble vía, generan experiencias significativas de vida.

Estas son algunas de las expresiones de los niños, niñas y adolescentes que participan de los cursos de robótica:

Uno se siente chévere, porque podemos hacer proyectos que no teníamos ni idea de que éramos capaces de hacerlos”, “Dar respuesta a necesidades que vemos en la cotidianidad, nos hace sentir importantes” “Por lo general, se piensa que la robótica es solo para los niños, pero podemos comprobar que a las niñas también nos gustan estos temas y podemos inventar y hacer proyectos innovadores”.

Es evidente en los participantes el gusto por la tecnología, en donde ponen en juego su capacidad creadora y de innovación, y en donde permanentemente afirman  “todo lo imaginado puede ser posible”.